viernes, 4 de diciembre de 2009

Bernanke defiende el papel de la Fed ante las críticas de republicanos y demócratas

El presidente de la Reserva Federal ha asegurado que la crisis habría sido peor sin la Reserva Federal.- El Senado debate su futuro como presidente de la institución

Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal ha defendido su gestión al frente de la institución en cuanto a las políticas y medidas desarrolladas para paliar la crisis financiera en su comparecencia ante el Comité Bancario del Senado. Las críticas de demócratas y republicanos que le han llovido ponen en cuestión su continuación en el cargo durante un mandato más.

Es dudoso afirmar que en su conjunto, las medidas de la Reserva Federal hayan contribuido sustancialmente a la mejora significativa de las condiciones financieras, aunque ahora se parece atisbar un tímido inicio de la recuperación de la economía americana y las de algunos otros países. Pero no en todos sus frentes, curiosamente hoy, se ha publicado que la actividad del del sector servicios en noviembre se ha caído de manera inesperada.

No entiendo hasta que cierto punto se puede asegurar, y más en esta complicada situación de incertidumbre económica, sobre las posibilidades de una pronta recuperación de la actual situación económica. Este pasado domingo Bernanke señalaba que “el peligro de que EE UU caiga en una depresión ha pasado”, y que la recesión "probablemente" terminará a finales de este año.

Como todos sabemos, la condición indispensable para una recuperación "sostenida" es que el sistema financiero vuelva a funcionar regularmente, y eso no está tan claro que vaya a producirse en las próximas fechas.


El capitalismo se tambalea

Bernanke ha aseverado, además, que ningún banco grande estadounidense es insolvente y ha prometido que si las cosas empeoran el Gobierno no los dejará quebrar, sino que intervendrá para evitar los efectos de una bancarrota en el sistema financiero.

Como ejemplo de esto es la compra de casi el 80% de la aseguradora AIG en septiembre del año pasado, que realizó el jefe de la Reserva Federal.

Aunque no fue una medida que tomó de buena gana, y ha reconocido que es "injusto" que los contribuyentes tengan que aportar dinero para rescatarla ahora pero, no obstante, muy probablemente no había otra opción, porque la quiebra de la aseguradora habría arrastrado a todo el sistema bancario.

El Gobierno americano ha inyectado más de 170.000 millones de dólares (131.732 millones de euros) en AIG desde septiembre, más que en ninguna otra empresa financiera. Y pese a todo este esfuerzo de intervención pública, la aseguradora tenía previsto pagar hoy 165 millones de dólares (128 millones de euros) en bonificaciones a los ejecutivos que hicieron las apuestas arriesgadas. Qué burla!!

Bernanke ha admitido que, en la segunda mitad de octubre, "el sistema financiero global estuvo muy cerca del colapso", pero se evitó con el programa de rescate financiero aprobado por el Congreso por valor de 700.000 millones de dólares (542.425 millones de euros), gracias al cual el Departamento del Tesoro ha inyectado capital en los bancos.

Bernanke ha dicho que es necesario más regulación de los bancos grandes y posiblemente el establecimiento de una entidad que vigile el sistema financiero en su conjunto. Actualmente, la responsabilidad de regular la economía en EE UU está dividida entre numerosas agencias, incluida la Reserva Federal.

En cualquier caso, las explicaciones de Bernanke no han sido suficientes para los republicanos, que han criticado la política de de tipos de interés demasiado bajos durante demasiado tiempo (siguen entre el 0 y el 0,2%) y los planes de rescate del gobierno a Citigroup o AIG.

La confirmación de Bernanke para continuar en el puesto depende primero del visto bueno del Comité de Banca y luego del Pleno del Senado, cuyo mandato concluye el 31 de enero.

Según las normas del Senado, debido a esa objeción los dirigentes demócratas necesitarán 60 votos para la confirmación de Bernanke en lugar de los 50 necesarios si no hubiese objeciones.